Existen cuentos de hadas que disfruto más
en papel, y no es que sea una amante del autoengaño, por el contrario, mi
reciente faceta de pesimista me lo tiene estrictamente prohibido, simplemente creo que el paso del tiempo y el amor se combinan de una forma
seca y ordinaria.
Al crecer, las sorpresas se buscan en otros lugares,
se miente a conciencia, se disfruta en presente y se evita el futuro. Las expectativas estorban
tanto como la moral, y entre todo este golpe de realidad, uno deja de buscar lo que
un día tanto quiso tener.
...y entre todo este golpe de realidad, uno deja de buscar lo que un día tanto quiso tener... ¡Mierda, como tienes razón!
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